Conviviendo con las pantallas

(Diciembre, 2019)

Después de años de uso del televisor, computador, tablets y recientemente smartphones, la medicina se ha percatado que la alta exposición produce daños en el cerebro de las personas. Algunos expertos aseguran que el cerebro del niño en desarrollo es más vulnerable al daño que el cerebro del adulto ya maduro. Pero aun así estos últimos no están exentos de riesgo.

Haga daño o no, lo cierto es que las pantallas están en nuestras vidas y nos han facilitado el existir. Hoy en dia podemos comprar por internet hasta en farmacias, nos informamos con un segundo de desfase de una noticia del otro lado del mundo, y hasta podemos ver por cámara a personas que se encuentran lejos de nosotros. Hemos avanzado en facilidades ¿Por qué abolirlas si podemos aprender a convivir con ellas?

Para convivir con este artefacto que nos hace daño tenemos que saber y tener bien en claro que la alta exposición es la que genera el daño, y no cualquier exposición. Los expertos definen que desde los 2 a los 5 años una hora de exposición diaria es suficiente, y a partir de los 5 hasta los 14 años dos horas de exposición diaria son recomendadas como máximo. Ojo que esto no incluye tiempos de estudio en un computador, la 1 o 2 horas se refieren netamente al tiempo de entretención del infante. Y ¿Qué hará el niño el resto del día? Bueno, pintar, estudiar con o sin pantallas interactivas, correr, participar de los quehaceres del hogar, bailar, compartir en familia y aburrirse a ratos para que nazca la imaginación y creatividad.

Los invito a no tenerle miedo a las pantallas ni a la crianza, esta última es un mundo por descubrir, y créanme que la mejor forma de compensar el tiempo que pasamos separados por las largas horas de trabajo es pasando tiempo en familia. No deje de leer el próximo capitulo “Niños, la cena está servida”.

 

La Miss